domingo, 27 de diciembre de 2015

Lo hermoso de vivir

Y no me considero una persona superior a nadie,
Hay en mi muchas cosas que debo seguir aprendiendo, sentimientos, actitudes, que seguro hay que cambiar en mí.
Pero lo bueno es que trato de investigar, indagar en mi qué cosas hago mal y las cambio.
Así fui creciendo, viendo en cada experiencia qué hacia mal, en qué no era sincero.
Lo bueno es que al día de hoy toda la gente que conocí tiene los mejores recuerdos de mí. Porque supieron ver que todos cometemos errores y que lo importante es la esencia.
Me hablan de ser agresivo, y eso, sé que no soy. Si era muy emocional, impulsivo pero de arrepentirme si me equivocaba y cuando lo veía, no lo ocultaba ni me gustaba. Nunca me gustó cometer errores, pero como humano me equivocaba y alejaba el orgullo para pedir perdón si contestaba mal o me sacaba de la manera que sea. No me gustaba, me sentía mal, con un retorcijón en el estomago. Así me pasó con amigos, parejas, hermanas, compañeros de laburo y agresivo de miles de maneras se puede ser, con una palabra, una actitud, no se es agresivo sólo físicamente como tratan de hacerme ver, cosa que no soy.
Pero veo los frutos de mi manera de ser en cada una de esas personas que hoy están a mi lado y las que no al verlos o al cruzarlos tienen los mejores recuerdos de mí, como buen compañero, amigo, conocido, pareja, familia. Guau... es impresionante el cariño que he recibido en mis peores momentos. Es hermoso cosechar eso cuando sabes que tenes errores y eso te muestra que todos tenemos errores mayores o menores, distintos o de otra manera. Pero todos pudieron ver lo más importante: La persona es sí.
Y es hermoso, me siento súper, súper agradecido de cada persona que conocí, y especialmente de esas 2 personas que me hicieron conocer el amor a su máxima nivel humano, como a cada uno que conocí que me preparó para esos momentos. Quizás no llegaron a esas parejas, pero aprendí a conocerme, a saber qué  quería, que buscaba, qué me gustaba, gracias a ellos. Si no quizás no hubiera llegado a tener esas historias hermosas.
Y eso veo, que en este caminar nunca nos cruzamos gente por casualidad, de todas aprendemos si buscamos en nuestro interior ser sinceros, de ser mejores personas, de no quedarnos con lo malo o el dolor vivido. Vamos aprendiendo, todo el tiempo, y yo soy una persona sedienta de crecer, y para eso debo aprender, en general por las experiencias, porque creemos muchas cosas de teoría y cuando las vivimos vemos que no son como las pensábamos, que no actuamos como creíamos, surjen cosas que no las planeamos y nos preguntamos ¿y ahora? Ahí nos quedan 2 caminos (siempre hay más de un camino) nos preguntamos: ¿Soy sincero conmigo y veo que me equivoqué yo? o ¿Sólo veo que se equivocó el otro para tener razón? (en general porque el orgullo, que todos llevamos en mayor o menor medida, no nos deja dar el brazo a torcer). Esa razón que queremos tener es un mecanismo de defensa, porque el equivocarnos duele, duele mucho saber que no estabamos siendo como decimos. Y ahi debemos preguntarnos si realmente queremos crecer y asumir, para poder cambiar  o quedarnos asi y estancarmos. Porque sólo en la Verdad hay crecimiento real.
Y es loco, porque el karma nos vuelve a cruzar con esas cosas hasta que aprendamos.
Todos vinimos a aprender lo mismo en esta vida, de distintas formas, con distintas experiencias. Pero todo es con el mismo fin. Llegar a ser plenos en nosotros. Sin rencores, odios, orgullos, envidias, esas emociones que solo nos ocapa la luz que llevamos.
Por un mundo mejor entre todos, empezando por nosotros.
Cambiar el mundo esta empezando por nuestro interior, uno solo no hace mucho si no lo siguen los demás.
Mi vida entera es, fue y será seguir aprendiendo de todo lo que me pase.
Es lo hermoso de vivir.

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